Los mercados financieros continuaron durante agosto ajustándose a la baja, ante condiciones adversas en las economías desarrolladas que podrían permanecer durante los próximos meses. El mercado bursátil de EEUU enfrenta la presión por controlar la inflación y luego de las declaraciones del presidente de la Reserva Federal, la incertidumbre sobre el futuro inmediato de la economía estadounidense ha aumentado. Por su parte, en el continente europeo los mercados financieros están buscando claridad a la luz de un invierno incierto, sin gas para la calefacción; por lo que, países como Alemania, están lidiando con una situación atípica, mientras que buscan atender una elevada inflación, poco habitual en el continente. Estas situaciones, en conjunto y potenciadas entre sí, han derivado en contracciones en los portafolios de inversión globales.
Las dinámicas mundiales tienen repercusiones en nuestro país. La herramienta por excelencia para el control de la inflación de la Reserva Federal de los Estados Unidos son las tasas de referencia, el incremento constante durante este año ha llevado a que las tasas de interés pagadas por los demás países del mundo también deban ser ajustadas al alza. El aumento de tasas impacta los portafolios administrados, ya que genera minusvalías por valoración a precios de mercado en el corto plazo y mejores rendimientos en el largo plazo. Siguiendo en la misma línea, Costa Rica también está luchando contra el mismo desafío: controlar una inflación elevada y con una tasa del desempleo mayor al 10%. A grandes rasgos, estos dos factores son los que generan minusvalías mensuales en los portafolios y tasas reales de inversión más bajas por la caída de los precios.
De manera circunstancial, el valor del colón costarricense se revaloró frente al dólar durante este mes. Este fenómeno se considera antinatural, ya que con el incremento en tasas en Estados Unidos, el dólar se vuelve más atractivo, y un ejemplo de esto, es que el dólar llegó a una paridad de 1 a 1 con el Euro. En Costa Rica sucedió todo lo contrario. Las razones pueden ser varias, lo que sí es relevante es el movimiento esperado en el mediano y largo plazo y en ese sentido, se espera que el proceso de devaluación del colón continúe.
El mundo entero está lidiando en este momento con dificultades macroeconómicas, los efectos de la pandemia se siguen sintiendo en las economías mundiales. Ante estos escenarios que se escapan de nuestro control, el equipo de la OPC-CCSS se mantiene vigilante de las inversiones de los Fondos Administrados.
Continuamos trabajando con la certidumbre de que las situaciones adversas pasarán, es una máxima en el mercado bursátil que las economías se manejan en ciclos y precisamente nos encontramos en una fase de contracción. No obstante lo anterior, continuamos administrando los fondos con prudencia y diligencia, buscando resguardar los recursos de nuestros afiliados.